Este jabón está pensado para personas con problemas de piel como psoriasis, eccemas, dermatitis, rosacea, etc...En su composición he empleado varios aditivos específicos para este tipo de problemas como son el aceite de "borago" y los "barros del mar muerto".
El aceite de borago ya lo he utilizado en otros jabones con muy buenos resultados, pero la novedad de este está en los barros y las algas.
El agua del Mar Muerto contiene 21 minerales distintos, entre los que se encuentran el magnesio, calcio, bromo y potasio, y algunos de ellos no se encuentran en ningún otra agua de nuestros mares. El Mar Muerto contiene 10 veces más sales y minerales que el Mar Mediterráneo. Estas sales minerales poseen efectos relajantes, anti-alérgicos, calmantes, hidratantes y supernutritivos, y además de fortalecer nuestro organismo, revitalizan el tejido celular de la piel.
Los barros del Mar Muerto son una mezcla de agua, materia orgánica y minerales, que en estado natural son utilizados en el campo terapéutico y cosmético. Limpian la piel en forma profunda y la nutren con sus compuestos minerales vitales, actuando como rejuvenecedor, antiarrugas, antiseborreico, anticelulítico, exfoliante, revitalizador, célulo regenerador, regulador circulatorio y reenergizante.
Las algas son una verdadera nutrición para el cuerpo porque aporta aminoácidos, vitaminas, oligoelementos y minerales que previenen el envejecimiento. Las algas son productos de gran utilidad para la belleza, ya que son consideradas rejuvenecedoras de la piel y las células, también fortalecen las uñas, la piel y el cabello, combaten la celulitis, elimina toxinas del organismo y nutre la piel.
Los ingredientes de este jabón son: aceites de oliva, coco, maíz, palma, ricino, borago, manteca de mango, manteca de karite, alga spirulina, barros del mar muerto, aceites esenciales de litsea cubeba, cedro, bergamota, romaro, eucalipto y tintura de benjui.
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